miércoles, 11 de noviembre de 2015

Más de ellos.




Quiero escribir, pero estoy tan vacía de dar, que no se si puedo entregaros algo, algo que ya no haya sido entregado. Me siento así, vacía pero repleta, entregada a cuerpo y alma a ayudar a crear otros cuerpos y otras almas. Personitas que empiezan a caminar por este nuestro mundo, en sus propios mundos. Ayudándoles a conocer a quienes habitan a su alrededor y a lo que habita a su alrededor, pero al mismo tiempo ayudándoles a conocerse a sí mismos. Cubrir sus necesidades de supervivencia y ofrecerles una herramienta tras o otra que le permitan comprender el mundo de fuera, su mundo de dentro y ser felices en ambos.
Caigo una y otra vez, unas veces por mis propios tropiezos, otras veces por que me veo empujada hacia el suelo. Pero me levanto, una y otra vez me levanto y les miro a los ojos y vuelvo a empezar. Tengo y tendrán toda una vida para comprenderse  y comprender el misterio de estar vivos, una vida para buscar lo mejor de la vida en su propia vida, siendo felices y estando en armonía con todo lo que les rodea. Ojalá pronto aprendan que sólo son una mínima parte de un TODO infinito y misterioso, pero una mínima parte que tiene que caminar con paso seguro, calmado, confiado y feliz, sobretodo feliz, con lo que tienen (mucho o poco) y con lo que son (únicos).
Ahora tengo mis manos ocupadas, uno a cada lado, y no puedo perder ni el ritmo, ni la fuerza ni la esperanza en ellos ni en mí. Ahora tengo la vista, el oído y el tacto lo más funcionales posible, tiene que ser así para que no se me escape nada que pueda dañarlos. Pero sobretodo tengo el corazón latiendo a un ritmo lento y pausado, para disfrutar así cada mirada, palabra, gesto o caricias que me dan y les doy. Saboreándolos y saboreando así la vida que es más compartida que nunca.
Me enseñan a estar presente en cada momento porque en cada momento están presentes y me enseñan a dar sin límite y a amar sin límite.
Aparcado todo lo demás, aprendo a disfrutar de este nuevo papel. Espero saber representarlo con éxito. El tiempo lo dirá. Mientras tanto aquí sigo, presente y plena.






jueves, 24 de septiembre de 2015

Ellos


No tengo tiempo de nada. A nada que no sea besar, acariciar y abrazar; besar, acariciar y abrazar; besar, acariciar y abrazar. No me busquéis en ningún pensamiento distinto, en ningún movimiento distinto, en un lugar distinto que no sea en éste.
No tengo tiempo de nada. A nada que no sea agradecer y agredecer y agredecer una y otra vez a la vida por tenerlos prestados, por tenerlos a mi lado antes de que ellos decidan de que lado quieren estar.
No tengo tiempo de nada. A nada que no sea sentirme viva, completa  y única solo en una de sus miradas, en uno de sus gestos y en una de sus palabras o silencios compartidos.
No tengo tiempo de nada. Fluyo con ellos y si me estanco en alguna nube gris, la dejo partir sin dilación  y sin lucha. "Aquí no te quedes, no tengo tiempo para tí". Nube gris de pensamientos o de actos que pueda nublar mi vista y que no me deje poder verlos con claridad. ¡¡Quiero luz para poder contemplar cada milímitro de su piel y silencio interno y externo para poder escuchar cada uno de sus sonidos!!
No tengo tiempo de nada. De nada que no sea entregarme y entregarlos a la vida.

domingo, 17 de mayo de 2015

Me rompí

Me rompí cuando quisiste irte y me rompí cuando no quise que volvieras. Me rompí cuando ya no sabía que decir ante un silencio o ante tu mirada huidiza. Me rompí cuando cogiste su mano y no la mía. Me rompí cuando me ocultaste esa información. Me rompí cuando no compartimos más risas. Me rompí cuando me dejaste con la palabra en la boca. Me rompí cuando buscaste una nueva opinión. Me rompí cuando dejaste de mirarme. Me rompí cuando no sé que decir y cuando lo que digo no tiene sentido. 
Me rompí al darme cuenta de que no soy capaz de reír a carcajadas, que no soy capaz de ahogarme en mi propia risa, que no soy capar de desnudarme y dejar de fruncir el ceño, que no soy capaz de estirar las piernas, abrir los brazos y solo mirar. 
Me rompí cuando dejé de escribir cada día, cuando dejé de escuchar  música, cuando dejé de pensar en qué ponerme, cuando dejé de comprar un adorno para mi pelo, cuando dejé de vestirme para estar guapa. Me rompí cuando dejé olvidada la palabra "NO" y cuando mi agenda era la agenda de otros. Me rompí cuando te fuiste.
Me rompí y mis pedazos quedaron esparcidos en demasiados pensamientos, en insomnio, en dolores, en miradas perdidas, en ceños fruncidos, en silencios, en ´pérdidas y en mentiras.
Me rompí y solo solo una pequeña parte de la que podría llegar a ser.

lunes, 4 de mayo de 2015

Inimaginable

Los días pasan, tu creces. Los días pasan, yo crezco. Los días pasan y crecemos,ambas crecemos, por dentro y por fuera,...
No me puedo imaginar tu cara, ni puedo imaginar lo mucho que te voy a querer, estoy segura de que me quedaría corta. Tampoco me puedo imaginar la cantidad de sonrisas que me vas a arrancar ni la cantidad de lágrimas que voy a derramar, estoy segura de que también me quedaría corta.
Todo será diferente y único, porque serás diferente y única a todas y a cada una de las personas que existen. A nadie podrás parecerte, nadie podrá parecerte a ti.

Perfecta en tu imperfección y yo perfecta en mi camino de buscar nuestro camino.
Podré simular una sonrisa cuando no haya ganas de sonreír, podré simular un suspiro cuando un grito quiera arrojar, pero no simularé que mi vida y tu vida se dan la mano para siempre, no simularé que se abre mi pecho al pensar en ti ni que mis brazos estarán siempre abiertos a los tuyos.
Podré controlarme y no tenerte siempre junto a mi pecho, bien " estrujaita"; podré controlarme y no comerte a besos; podré controlarme y, con el tiempo, soltarte a ratitos la mano.
Me esforzaré por estar y porque sepas que estoy, sin siempre estar; me esforzaré por ver otra imagen que no sea la tuya, de oír otras palabras que no sean las tuyas y de no planear mi tiempo al compás del tuyo. Me esforzaré por respirar un aire un pelín lejos del tuyo, aunque sea solo tu imagen, tus palabras, tu cuerpo, tu aire y tu vida la que quiera siempre pegada a la mía. Pido perdón de antemano si no siempre lo consigo...
Nunca pude imaginar tanto amor  y nunca  pude imaginar que ese amor pudiera ser mayor cada día- Crecer al paso de los días, como ambas crecemos, por dentro y por fuera,...

sábado, 18 de abril de 2015

Viva y presente.

Me siento viva y me siento presente, viva para vivir y presente para vivir el presente, solo el presente. Solo el instante que veo, que oigo, que siento..., y allí quedarme, ni un minuto antes, ni un minuto después.
Me siento viva para vivir lo que tenga que vivir, momentos felices que se irán, momentos tristes que se irán, momentos de impotencia, rabia o frustración que también se irán. Todo se irá, lo bueno y lo malo. No lo dejes ahí más de lo necesario,  no lo dejes en ti, más de lo necesario.
Me siento presente para sentir por cada poro de mi piel, por cada neurona de mi mente y por cada punto de luz de mi alma, todo lo que tú y el mundo quiera ofrecerme, todo lo que tú y el mundo quiera mostrarme. Tú que me miras y el mundo que me acoge, yo que te miro y el mundo que me sirve de puente para acercarme a ti. Tú que eres todo lo que yo no soy: persona, cosa, situación, acontecimiento, sentimiento, pensamiento,...
Me siento para sentir, me paro para sentir, me relajo para sentir y, sobretodo, para sentirme.
Me siento para vivir, vivir, vivir, vivir...
Para un segundo y date cuenta que puedes dejar de vivir en cualquier segundo, no eres inmortal, Para y piensa que quizá estés desperdiciando ese último segundo en preocupaciones, personas, imágenes, sensaciones, obsesiones, miedos, sonidos, acciones..., que no son importantes. Para y piensa que quizá tengas que hacer un cambio, que quizá tengas que cambiar para empezar a sentirte viva y presente.

jueves, 19 de marzo de 2015

Si, no



Sí, sí, sí. sí puedo.
No, no, no, no puedo.
Sí, sí, si, sí aguanto.
No, no, no, no aguanto.
Sí, sí, si, sí podré.
No, no, no, no podré.
Sí, sí, sí, sí aguantaré.
No, no, no, no aguantaré.
¿Tensamos más la cuerda?.
¿Tensamos más al cuerpo, al alma, al corazón, a la cabeza, a la piel, a la vista cansada?.
¿Sujetamos más las expresiones de dolor?.
¿Callamos a los movimientos involuntarios?.
¿SEGUIMOS ESPERANDO?.
¿A QUÉ?.

Encadenada.

Muchos días con muchas horas sin escribir. Muchos días con muchas horas guardando y guardándome. Espero el momento perfecto para liberar, y esperando mi liberación me encadeno. Me encadeno a la tierra, a un único y mismo espacio de tierra, con una única y misma imagen frente a mí, con un único y mismo sonido. Me encadeno a y me inmovilizo, me quedo parada. Pero el tiempo pasa.
Muchos días con muchas horas esperando a que llegue el día y la hora idónea para salir, pero nunca llega.
Ayer desperté con una losa en la espalda, desperté con un peso en el pecho, desperté con una pena en el alma. Y me acompaña. Dicen que no la mire, que no le preste atención, que no la escuche. Dicen que es mejor seguir caminando,¿pero se puede seguir caminando en ese único y mismo espacio de tierra, de imagen y de sonido?. Y en silencio estoy, ni hablar ya puedo. No intento explicarme siguiera, no me esfuerzo en que me entiendas, no me apetece darme de nuevo. ¿Para qué?
No me entiendes, lo sé. Palabras unidas sin sentido. Sin sentido es como me encuentro, así que sí, si me entiendes.


martes, 20 de enero de 2015

Gracias :-)

Vida mía, vida tuya, vida que nos ha unido. Gracias por dar voz a mi vida, gracias por darle movimiento, por darle risa, por darle llanto. Sonrisa al verle, risa al oírle, amor al sentirle. Plenitud plena, existencia plena que llena mis días.
Vida mía, vida tuya, vida que nos ha unido. Gracias por hacer girar mis días y darle sentido a ellos, gracias por cumplir mis sueños más imposibles, mis deseos más profundos. Agradecimiento constante por poder amar lo que es realmente amor.

Vida mía, vida tuya, vida que nos ha unido. Gracias por crecer dentro, por crecer fuera, por crecer por dentro y por crecer por fuera. Gracias por estar, ser y vivir.

Desaparecer.

No me dejes tirada, hace frío y llueve. Si lo haces no sabría hacia donde ir, derecha o izquierda, hacia delante o hacia atrás, daría igual la dirección, cuando nadie te espera en ningún lugar.
Está oscuro, si hubiera luz y no hiciera tanto frío, quizá me sentiría con más fuerzas para deambular, girar y perderme entre las calles sin asfaltar, las aceras invisibles y los caminos sin señalizar. Pero nada me anima a moverme de este lugar, del lugar donde me dejaste.
¡Quién lo iba a decir!, soy la misma que tenía mil alternativas a una propuesta, mil caminos para un único paseo, mil caras para una misma frase. Pero se me acabaron las ideas y las ideas acabaron conmigo. Ahora me limito a esperar que cojas mi mano y guíes mi camino. Te sigo.
No soy más que lo que soy ahora, ni planes ni proyectos futuros, no me veo más allá que en el siguiente paso, no tengo fuerzas para recorrer el camino. Solo quiero parar y que sea la vida quien se mueva, quien transforme mi escenario, quien me anime a levantar mis brazos y tocarla.
Me duele abrir los ojos y ver, alzar mis manos y tocar, levantar la cabeza y oír. Me duele tener que salir del lugar en el que quiero habitar.
Sin ruidos, sin movimiento, sin pensamiento, sin miedos, sin luz, sin tener que ser y tener que estar. Desaparecer podría ser el final.