sábado, 20 de julio de 2013

Tiempo libre

Tiempo de descanso, tiempo para no hacer nada. Todo el día para tí donde tú decides, programas, planteas y diseñas tu propio día. Ahora sí hago lo que me apetece, ahora no, ahora no sale como quisiera, ahora sí que parece que se acerca a lo que quiero, ahora esto ha resultado penoso, ahora parece que mejora,...
Tiempo libre, tiempo para hacer lo que quieras hacer. Pero antes tengo que hacer esto, espera que antes tengo que ver a alguien, espera que antes tengo que ordenar esto, espera que antes tengo que ayudar a alguien, espera que antes tengo que arreglar esto, espera que antes tengo que perderme, olvidarme, ignorarme, atormentarme,...

Tiempo libre de descanso, tiempo para reencontrarme y desconectar y quererme y relajarme y dejarme llevar.

- "Sí, dejarme llevar, ¿pero hacia dónde?".
- "¡Quieres callarte ya!"

viernes, 19 de julio de 2013

Para ya, porfavor

Para de hablar, porfavor, para de hablar. Tus palabras son pequeñas gotas que colman mi vaso a rebosar, son pequeñas piedras debajo del colchón, música estridente que me agobia y no me deja escucharme.
Para de moverte, porfavor, para de moverte. Tus movimientos no me dejan ver el paisaje, no me dejan relajarme ni sentirme, no me dejan en paz.
Para de programar, porfavor, para de programar. No me digas qué queda por hacer, qué no he hecho, qué está imperfecto, qué ha resultado patético o inconcluso. No sigas recordándome mi imperfección.
Para de buscar inconvenientes, porfavor, para de buscar inconvenientes. Imperfección, errores, desperfectos, roturas..., todo a mejorar.


Para de estar triste, porfavor, para de estar triste. Tus pensamientos, tus movimientos, tus gestos, tus silencios, tu ceño frundido, su mirada baja, tus ojos vacíos.
Para de compararte, porfavor, para de compararte. Imitarás solo a ratos, aparentarás solo a ratos, disimularás solo a ratos, esconderás solo a ratos.
¿Paras ya, porfavor?, ¿vas a parar?..., ¿o es que tengo que pararte yo?

domingo, 7 de julio de 2013

Espejos

Preferiría vivir sin espejos, así no tendría que quedar prisionera en ninguno de ellos. Podría inventar mi rostro, mis manos, mis pies..., imaginaría que aquel vestido realza mi figura y que el color de aquel jersey hace juego con el color de mis ojos. No habría nada que esconder ni nada que disimular, todo sería limpio, claro y transparente. Nunca más volvería a esconderme de mi propia imagen, ni volvería a compararme con otras imágenes. Podría entonces ocuparme de vestirme por dentro, porque vestirme por fuera no tendría sentido.
Preferiría vivir sin espejos, sin adornos, sin prendas que rellenen por arriba, que aplanen por abajo, que escandan cicatrices y que realzen mentiras.
No, no son necesarios los espejos, porque todo lo que tú quieras ver de mi te lo muestro sólo con una mirada, la mirada que rehuyes al mirar solo a través de los espejos.

Me levanto y me voy

No es necesario que hables para que yo te escuche, ni es necesario que aparezcas para que te vea. No es necesario que me llames para volverme a verte, ni es necesario que me lo pidas para que yo me acerque. Curioso que hayas entrado sin invitarte y que te hayas sentado sin permiso. Curioso que continúes ahí parado cuando yo ya te invité a salir y te abrí la puerta de mi misma. Y ahí continúas... Continúas a mi lado y conmigo, parado e inmóvil, en el mismo hueco de mi cabeza, en el mismo lugar de siempre; tan cerca que podría estirar mis brazos y mi manos podrían tocarte, tan cerca que si me concentro un poquito podría mi corazón adaptarse a los latidos del tuyo.Interesante sería eso, dos corazones mirando a escenarios distintos, en realidades paralelas, en mundos separados.
Me levanto y me voy, mis pies se separan, mi cuerpo se retira, mi corazón busca su propio compás. Me levanto y me voy, me alejo de tu sombra, de tu presencia y de tu esencia. Me levanto y me doy cuenta de que parte de mí se quedará para siempre contigo y que parte de ti se quedará siempre conmigo. Me levanto, me alejo, me despido, me voy. Sí, me voy, pero apenas puedo ver el camino de vuelta, creo que mis gafas están empañadas, algo húmedo resbala por mis mejillas...